Solo un Golpe

Tema: Solo un Golpe Vie 21 Feb 2014, 10:42 pm

Hacia un frio que te calaba hasta los huesos, podía ver mi propio aliento subir en volutas blancas frente mis ojos.
Yo caminaba haciendo eses, escuchando la nieve crujiente bajo mis pies, las manos en los bolsillos y el alcohol emborronando mis pensamientos.
Me había tomado unos tragos, y varios de mas, en un pub nuevo que habían abierto. El maldito afortunado de Max, uno de mis compañeros de trabajo que lo habían ascendido. Era un jodido hijo de puta con suerte pensaba.
-Jodido hijo de puta con suerte - escupí ebrio arrastrando las letras.
Y me vinieron unas repentinas ganas de golpear su estúpido y alegre rostro y comprobar si podia borrarle la felicidad a golpes.
La cabeza me comenzó a dar vueltas, se me puso la vista borrosa, parecía que todo el mundo se inclinaba y se ponía de cabeza, el estomago me subió y me bajo y en un dos por tres vomite todo lo de la noche y mas, pero no me atreví a pensarlo. Me afirme en un poste de luz y descanse mi frente en el. Se me doblaron las rodillas y caí en la fría nieve.
-Maldición-masculle limpiando le vomito de mi barbilla con la manga de mi chaqueta de cuero, cerré los ojos un momento y descanse sentado junto a la nieve vomitada.
-Jo tío, ¿si que estas mal he?
Escuche una voz conocida, entreabrí mis ojos y vi la sonrisa bobalicona de Max.
Desee estampar mi puño contra su cara, ¿Que le podría hacer un golpe? Un solo golpe en su estúpida cara.
--¿Te tomaste unos cuantos tragos de mas he?
Si, pensé, un solo golpe no le hará nada.
Y me abalance sobre él.
Lo tire de espaldas contra la nieve y sentado sobre el estampe mi puño sobre su cara.
La sensación fue lo mejor del mundo
Su piel helada chocando contra mis nudillos
El hueso de su nariz rompiéndose bajo la fuerza de mi golpe.
La sensación de poder.
Poder
Poder
Poder
-Un solo golpe no te hará nada-dije ebrio y enloquecido.
Lo golpee, pero deseaba mas, mas, mas, mas.
Y luego del primer golpe vino el segundo y el tercero y el cuarto y su rostro se transformo en una masa sanguinolenta bajo mis manos, bajo mis puños
Reía como desquiciado mientras su cara pasaba a ser un desastre al rojo vivo, la sangre corría hacia abajo empapando la nieve bajo el, sus ojos se veían como dos rendijas hinchadas y amoratadas.
Pero su sonrisa. Su maldita sonrisa aun se podía ver.
Me levante y lo patee, estrelle mi pie contra su maldita piel, golpeé sin descanso sus costillas, le pegue con furia, con la locura de un hombre borracho.
Max se hizo una bola apretada de dolor en la nieve cubierta de su sangre, que corría desde su boca abierta y gimiente.
La sensación era excitante
La adrenalina corriendo por tu sistema
La fuerza
Su carne golpeada contra mi pie
Me reía como un loco, me sentía un poco desquiciado, pero me importaba una mierda.
Agotado me senté junto a Max y me tendí de espaldas junto a él.
-Ahora ya no tienes esa sonrisa. Imbécil- masculle.
Cerré los ojos unos minutos. A lo lejos se comenzaban a oír las sirenas de la policía que no tardaron en llegar junto a mí.
Uno me tomo de los hombros y me paro de un solo tirón, yo le escupí a la cara y le di una sonrisa desquiciada.
Una mujer hizo acto de presencia junto al gorila que me tenia agarrado.
-¿Que paso aquí?-exigió saber frunciendo el ceño.
-Un solo golpe-murmure-un solo golpe es bueno como el infierno-le dije mientras sonreia con locura.
La mujer me miro con asco e hizo un seco movimiento con la cabeza. Una señal para el gorila, que me esposo y me tiro dentro de una patrulla.
La mujer conducía.
Yo en el asiento de atrás esposado canturreaba.
-Un solo golpe, un solo golpe, un solo golpe...

Puede ser bueno como el infierno.